El 4 de noviembre vino un chico muy majo. El
nos dijo que se llamaba Comodín. Era un Mago. Sí, has visto bien, un mago en el hospital. Nos enseñó un puzzle y fue muy gracioso porque al principio parecía difícil, pero al final era bastante fácil. Luego hicimos una mariposa con truco que se sujetaba con el dedo ¡Era magia!
La parte final fue muy original y me gustó mucho. Hizo que las pompas se quedaran en nuestros dedos y en todas partes de nuestro cuerpo. Me gusto muuuuuuuucho.
Había un montón de niños, madres,
padres, abuelas, tías y hermanas.
Todos se lo pasaron muy bien.
Fue una tarde excelente.
María Quiñones Redondo - 11
años.
