Autoras: Ralitsa y Astou
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Había una vez un duende muy revoltoso y alegre, que se llamaba Pepito.
Un día salió con sus amigos al parque y se le perdió la llave. La buscó, pero no la encontró y se puso muy triste.
Cuando llegó a casa, tocó a la puerta y pronto le abrió su madre. Pepito se puso muy contento y feliz.
Este cuento se acabó
porque el duende se marchó.